Ya estoy en América, ya estoy en los USA y ya estoy algo viajado también, afortunadamente. Me lo noto, afronto los desplazamientos y situaciones con cierta naturalidad pero sin dejar de sorprenderme, claro está.

 

Recuerdo unos años atrás y con ciertos viajes ya en las espaldas cuando me introduje por primera en el  metro berlinés para llegar al alojamiento que se encontraba en la zona este. Ver gente un tanto variopinta por los largos  y un tanto decrépitos túneles así como numerosas tendencias urbanas juntas en tan poco espacio físico y temporal me resultó hostil en un inicio y eso considerando que ya había estado anteriormente en el país así como en otras partes... Entonces, ¿cómo era posible que pudiera sentirme así?. Ya había vivido situaciones semejantes como la de perderse por las calles londinenses, como todo hijo de vecino o haber tenido que salir por piernas en el poco recomendable barrio sureño de Stockwell ante la amenaza de dos negros merodeadores con malas pulgas que salieron tras nuestra... y eso que el colega vitoriano me sacaba una cabeza, que no es poco, pero en ese barrio éramos descaradamente blancos y las horas tampoco eran la mejores…

Bueno, trate de normalizarme como si fuese conocedor de lo que acontecía en el andén berlinés y traté de cambiar el enfoque procurando ver la situación con mejor objetividad por si me estaba sugestionando a  mí mismo, efectivamente, así fue. Bien mirado, los grupillos de coetáneos heavitrones-gruncheros-punkys (todo mezclado) de variadas crestas policromadas, fosforitas, algo alcoholizados y  actuando estéticamente y formalmente de manera transgresora a lo comúnmente establecido pero, al fin y a la postre, dentro de los parámetros del propio orden imperante, me sosegó y permitió darme cuenta de mi autoengaño y de como la falta de perspectiva, pese a los caminos ya andados, lleva a uno caer en la tenacidad tozuda de los prejuicios llegando a malinterpretaciones y conclusiones equívocas, pese a que antecedentes previos sucedidos en la también teutona ciudad de Frankfurt pudieran justificarlos. Me jugué a mí mismo una mala pasada. Y ejque la flexibilidad resulta una herramienta indispensable. Pasado el tiempo, leí una cita de Mark Twain que decía algo así como que viajar era un ejercicio de consecuencias fatales para los prejuicios, la intolerancia y la estrechez mental. En mi defensa a tal desconcierto alegaré que dicho viaje lo realicé con una amistad maña de semblante seguro, apariencia ruda, un aire ario y con conocimiento del idioma teutón. Una persona, en principio, bien elegida. Llegado el momento e incrédulamente, comprobé como el citado prefirió abortar su interminable sesión del cyber por no recorrer de manera solitaria las dos manzanas que nos separaban del alojamiento ya que sólo le daba cosa, sic. Es cierto que Berlín puede imponer, pero en realidad está llena de gente amigable y la ciudad engancha. Pero ahora volvemos a los yu-es-ei, my friend, que para eso estamos.

 

Moqueta en un aeropuerto sureño, ¿para qué?. La chica de información, el chófer del autobús del aeropuerto y de los autobuses en general de toda la Florida visitada, vienen a ser negros y muchas son mujeres. Escasos son los blancos y ni rastro de latinos en estos gremios. En los buses todo es en inglés, no hay segundo idioma salvo el de los pasajeros, ahí nuevamente surge el español pues son mayoría los usuarios latinos. Muchos de los autobuses de línea siguen usando la cuerdecita para solicitar parada, ¡qué tiempos!, y muchos también tienen un biker en la zona delantera del autobús. ¡Cómo mola!. ¡Ya están tardando en ponerlo en España! ¿El precio es el mismo con o sin bici y si se paga con efectivo así que hay que procurar llevar la cantidad justa pues la máquina no ofrece cambio y el conductor no toca el dinero en ningún momento. ¡Ya están tardando en ponerlo en España! Se advierte como el transporte público, si bien resulta suficiente e incluso es más que aceptable en las zonas céntricas o de gran afluencia, se observa como decae en gran medida fuera de estas zonas,  alargándose de manera exagerada las frecuencias hasta el hastío. En la zona periférica de la Little Habana es así como digo, no en la zona neurálgica del parque del Dominó sino fuera de ella e indentificándose el proletariado con el servicio público rodado, al fin y al cabo uno puede lucir un Lexus por 185 $/mes, tal y como le escuché a una latina en conversación con otras, información que puedo acreditar que es cierta pues hay periódicos exclusivos y de buen lomo que no hacen otra cosa que ofertar vehículos, y claro,  eso de utilizar el transporte público pudiendo lucir un Lexus... En general, la adquisición de un vehículo resulta más asequible a esta orilla del charco. Por cierto, no puedo decir nada acerca de los puros cubanos pues parece que ya no fumo…olían bastante bien, ¡lástima!

 

En las zonas de turismo y hostelería se advierte como el empleado latino rezuma sobre el resto de procedencias, si bien el encargado o dueño viene a ser estadounidense y de raza blanca para más señas.

 

El use of english resulta dispar. Que una mayoría latina esté empleada en el sector turístico y de servicios no significa que domine el idioma del tío Tom. A decir verdad, se escucha un inglés muy correcto entre los latinos ya integrados y tener dicho nivel lingüístico abre puertas a empleos en general y  de mayor cualificación y remuneración en particular, aunque ya no se atesore más aptitudes, con eso basta. El idioma abre las puertas en un país muy activo a día de hoy con un índice de paro próximo al pleno empleo y máxime desde la perspectiva española...estamos hablando de un 5% y en un contexto en el que se ven carteles ofertando empleo en unos cuantos locales de Miami Beach. Fuera de ese grupo poblacional latino el nivel shakesperiano, el de me la agarro con la … es pues...eso, otro cantar. Quien más quien menos, la gente recién llegada y/o su círculo social es completamente latino o no han recibido, por lo general y por las razones que sean, una formación lingüística básica y van hablando u tanto a salto de mata. Y eso que bajo mi punto de vista mi nivel es algo análogo, pero hay saltos de matas y saltos de mata… Algo común y comprobado en los típicos bazares playeros de turismo de playa de Miami Beach es ver como las dependientas latinas huyen, con mejor o peor disimulo,  en el momento que advierten que no entienden lo que les dicen en inglés los cliente y tampoco, los mismos,  responden al cervantino latino. De lo abundante de este tipo de conducta puede concluirse que resulta norma.

 

Por otro lado y por extraño que pueda parecer, la comunidad latina no es ni con estas la que peor utiliza el idioma de la pérfida Albión pues lo que ha sido toda una sorpresa es comprobar como existe un subgrupo de paletos, al modo del personaje secundario de los Simpsons, Cletus Spuckler. Al parecer, vinculados a la etnia negra proveniente de los estados sureños algodoneros y tabaqueros pues, como he dicho,  no me esperaba encontrar a ciudadanos estadounidenses con verdaderas carencias, dudas y dificultades en el empleo de su propio idioma ya que hablamos de un país que dispone y utiliza todo el equipamiento habido y por haber, todo, para hacer cumplir la prerrogativa de ofrecer una educación obligatoria y  gratuita hasta la secundaria a todos sus ciudadanos, sin excepción. Por lo que todo me hace indicar que existe una América estadounidense profunda, ya sea rural o urbana, que por los motivos en los que no entraré a desgranar no han accedido a dicha educación básica. Por otro lado y una vez más, esto demuestra que se puede acercar la mula al río pero no se la puede obligar a que beba si la mula no quiere…sea aquí, allá o acullá y el que no quiera aprender pues que haga el favor de no molestar y dedicarse a otra cosa a la que le preste más dedicación y provecho dentro del respeto hacia con los demás de ésta nuestra comunidad...ele. Y con todo esto, estamos hablando de un porcentaje de paro técnico a día de hoy. Estos mismos, sin embargo también tiene hábito consumidor a la manera de la american way of life ya que eso sí lo han aprendido, adquirido y asimilado de buena gana, por lo deben de tener algún empleo o modo de subsistencia no ilegal pues aquí las normas tienden a cumplirse y cuanto antes mejor. No business no money. No obstante no quita que tanto estos paletos como el estadounidense promedio vienen a ser gente, por lo general, bienintencionada y dispuesta a colaborar. Eso es algo muy yanquí en la América de a pie de calle y también de agradecer. 

 

En mi modesto entender, la Fed no tardará en subir el tipo de cambio de su divisa y si no lo ha hecho ya es por la venta masiva de dólares estadounidenses que está realizando su gran reservista, el gobierno chino, como contramedida para sostener un yuan alto para así no comprometer su objetivo primordial de seguir adquiriendo materias primas, transacciones estas que vienen a realizare con el billete verde. 

 

Ejemplos representativos de esto casos tengo alguno que otro. No invento, como dirían mis cuates los chavos. Órale. Por un lado está el caso del primer establecimiento que pisé en los states nada más bajarme del autobús. Venía con hambre del viaje y buscaba algo seguro, algún establecimiento común donde pudiera desquitarme… en esas vi una pizzería tipo franquicia con las banquetas sobre las mesas, sin clientela pero abierta y gente latina dentro. Eran tres los latinos: uno de encargado dándole al smartphone, otra en cocina y otro de atención al cliente. El encargado lo estaba siendo únicamente por aquel día, ya que por lo que pude enterarme estaba de estreno en dicho puesto y había sido ungido como tal por ser el mejor de los empleados en el uso del inglés.

En aquel momento era el único cliente en el establecimiento y los tres estaban a mi disposición. Todo fue muy friendly  pero tuve que repetirles varias veces lo que quería, pues entre la marcha que llevaban y la diferencia lingüística  existente de la cocinera que era la que tenía un español más sucio y no hacía otra cosa que seguir de cháchara, entrometiéndose en la conversación del pedido con no sé qué platicas…tardaron un buen rato en servirme unas porciones de pizzas, por otro lado, manifiestamente mejorables. Tal es así que no tardado mucho entraron un grupo de tres al establecimiento y eso pareció hora punta. Eso sí, dispuse de refresco a discreción en el  autoservicio. El precio final no resultó caro ni barato tampoco. El local estaba al lado del alojamiento, pero no volví. Perdieron un cliente, pero estaba claro que eso a ellos no les preocupaba, estaban más interesados en comprarse un mejor smartphone de los ya de por sí buenos que manejaban, pero resulta que la pantalla de uno se había agrietado levemente y eso ya era motivo suficiente de sustitución…

 

Es decir, no es necesario procurar una optimización de la gestión del tiempo, del servicio o del producto, así como un control de gastos en el modelo de negocio ni estudio que se le parezca. Cuando se tiene un mercado con una demanda suficiente que acepta el producto que se le ofrece junto con una fiscalidad que no subyuga el negocio fructifica, señores.

 

Por otro lado y gracias a una prolongada conversación con un cubano ex-teniente del gobierno de Batista, conocí a una pareja italiana de unos cuarenta y tantos que regentan una tienda de moda textil ¡cómo no podía ser de otra manera, claro está! , en Washington Avenue de Maimi Beach desde hace más de veinte años y ahí la tienes…una familia funcionando sin haber aprendido hablar inglés aún, valiéndose de su idioma para entender menos que más el español e incluso teniendo que practicar mi pobre y oxidado italiano con ellos, entre otras cosas, para desoxidarlo e per che me piace parlare la lingua italiana. É molto bella e musicale ¡Mama mia!

 

Finalmente y como en todas partes, existe el mundo de los indigentes que no hay porqué soslayarlo en absoluto, pues forma parte de la realidad pura y dura, como cualquier otra. De destacar resulta la obviedad de no olvidar que bajo un tiempo cálido el comportamiento humano se vuelve más relajado y jovial, fomentando el asueto pues ciertas necesidades primarias como el cobijo ya viene dado por la bondad propia del clima por lo que no debería resultar extraño considerar que el porcentaje de personas sin techo sea aquí más elevado respecto a otras latitudes más  septentrionales de territorio con un clima más severo y exigente. Poniendo el foco más sobre la población autóctona que sobre la inmigrante, que responde más bien a otro  tipo de circunstancia, y al margen de las personas que arrastran sus patologías mentales-conductuales que les es imposible proporcionarse algún tipo de tratamiento…se percibe como vendría haber un tipo de indigentes, ahora ya maduras de aspecto bien parecido en tiempos pretéritos y en su mayoría de raza blanca, que el asueto, los placeres y vicios humanos los han prolongado durante excesivo tiempo como para, llegado el momento, retomar la situación y retornar al redil del sistema establecido de donde muchas de estas personas provenían y hubiesen anhelado regresar una vez terminada la fiesta. Por otro lado, los ahí que disfrutan y se sienten liberados de llevar un tipo de vida ajeno al sistema , personas a las que no les importa llevar un estilo de vida más básico a cambio de tener una mayor disponibilidad de su vida consigo mismos y sin que por ello deban sentirse afligidos, aunque son los menos diría yo. Este tipo de personas no vienen a mendigan al uso y se procuran su comida del sobrante consumista así como de la sociabilidad transversal y movilizada de sus compatriotas pues el yanqui sabe que no hay nada gratis, que una ayuda siempre viene bien si así lo estiman oportuno y que un par de golpes mal dados en un momento inoportuno puede llevar con los huesos a la calle a cualquiera. Pero aquí afuera no hace frío y eso hace que la cosa cambie. Equivocados o no, esto último da una idea del sentimiento de entereza, crítica, desarrollo y libertad de la mentalidad de los habitantes del país, si bien esto es algo que he observado también en parte de la comunidad  cubana, en su mayoría de carácter disidente.

 

De la ostentación yanqui, de ricos famosos y cosas parecidas haré una futura entrada enlazándolo con la visita al archipiélago residencial en torno a bahía Vizcaíno y así disponer de un registro de las fotos…

 

Seguiremos informando de los USA.